4 febrero 2025 – 31 julio 2025
Covadonga Pérez Muñiz, originaria de Gijón, creció rodeada por la naturaleza asturiana, un entorno de árboles frondosos y prados infinitos que marcó profundamente su sensibilidad artística. Desde temprana edad, este paisaje y las tradiciones asturianas se convirtieron en su principal fuente de inspiración, un hilo conductor que impregna su obra con autenticidad y conexión con lo orgánico.
Con la firme convicción de dedicarse al arte, decidió estudiar Artes tras finalizar el bachillerato, lo que la llevó a trasladarse a Bilbao. Allí, tuvo la oportunidad de descubrir nuevas técnicas y de entrar en contacto con un diverso abanico de artistas que ampliaron su visión creativa. Sin embargo, fue durante el tercer año de su carrera cuando experimentó un momento crucial en su trayectoria artística: el descubrimiento del trabajo de artistas textiles.
El arte textil se convirtió en su medio de expresión predilecto, una forma de materializar su visión creativa y traducir en hilos tejidos la esencia de la naturaleza que la rodea. A través de esta disciplina, logra capturar las texturas, los matices y los detalles orgánicos que inspiran su obra, recreando la riqueza visual y táctil del mundo natural.
Proyecto en residencia
Vibraciones sonoras es una instalación interactiva que fusiona el arte textil con la tecnología piezoeléctrica para explorar la relación entre el tacto y el sonido. A través de piezas elaboradas con materiales como lana y fibras, integradas con sensores piezoeléctricos, el espectador puede generar sonidos al tocarlas, dependiendo de la intensidad, el ritmo y la localización del contacto.
Este proyecto busca transformar la percepción del arte textil, rompiendo la barrera entre la obra y el público. Al permitir la manipulación directa, invita a una experiencia sensorial inmersiva que refuerza la conexión entre los sentidos y el entorno. La interacción con las piezas estimula la sinestesia entre el tacto y el sonido, generando una reflexión sobre nuestra forma de percibir la realidad.
Nacido como una evolución del Trabajo de Fin de Grado de la autora, Vibraciones sonoras surge de su interés por la sinergia entre lo textil, lo onírico y la naturaleza. En su trayectoria artística, la exploración de texturas y colores ha sido clave, pero sentía que el sonido era un elemento pendiente. Inspirada en los patrones rítmicos y visuales de la naturaleza, decidió fusionar la tradición de la creación de tapices con tecnología contemporánea, logrando una obra que conecta lo tangible con lo etéreo.
Este proyecto redefine la experiencia del arte, transformando las piezas textiles en medios interactivos que invitan tanto a tocar como a escuchar, ofreciendo una perspectiva innovadora sobre las conexiones entre sentidos y emociones.