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Inés Benito Riesgo

1 septiembre 2024 – 31 enero 2025

Inés Benito Riesgo (Pravia, 1998) es artista plástica, graduada en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca (2016-2020) y especializada en Edición de Arte en la Escuela de Arte de Oviedo (2020-2023). Ha complementado su formación con cursos de serigrafía, risografía y cerámica, desarrollando también proyectos de autoedición.

Su trabajo gira en torno al crecimiento personal y la influencia del entorno, centrándose en la experiencia de compartir piso y su impacto en la identidad. A través de un lenguaje visual que pone el foco en pequeños detalles y momentos cotidianos, trata de capturar la esencia de estas vivencias que transforman la manera en que nos relacionamos con los demás y con nosotros mismos..

Ha participado en residencias artísticas en Portugal, enfocada en muralismo, y en Alfara (Salamanca), dedicada al grabado y la pintura. En 2023 presentó su primera exposición individual en la Galería Dos Ajolotes (Oviedo) y ha mostrado su trabajo en espacios como la galería Pablo de Lillo (Oviedo), Espacio Local (Gijón), el Museo Valdelarte (Huelva) y el festival «Porrúa en bolas» (2024). También ha participado en Alma Gráfica, Feria Internacional de Arte Gráfico, y ha recibido una beca de la Fundación CIEC.

Artista participante en la exposición Terranautas. Notas para un nuevo mapa del mundo

Proyecto en residencia

Maniobras para andar por mi casa

El crecimiento personal es un proceso influido por las personas que nos rodean y las experiencias que vivimos. A lo largo de nuestra vida, atravesamos diferentes etapas y habitamos diversos espacios que nos permiten evolucionar y desarrollarnos. Un momento crucial en este proceso ocurre cuando dejamos el hogar familiar. Hoy en día, es común que los jóvenes tengamos que compartir piso, ya sea por razones económicas o de estudio. Esta convivencia nos expone a una diversidad de perspectivas y formas de pensar que, sin darnos cuenta, moldean nuestra identidad y nuestra manera de ver el mundo.

Estas experiencias generan momentos únicos que, aunque a menudo no seamos conscientes de su impacto en el momento, nos influyen de manera profunda. Capturar la esencia de estos momentos va más allá de lo que una simple fotografía puede transmitir. La pintura, en este sentido, se convierte en una herramienta poderosa para esta artista. Inés Benito desarrolla través del arte un lenguaje visual que explora y expresa aquello que no es evidente a simple vista. Valiéndose de la pintura resalta pequeños detalles, esos que suelen pasar desapercibidos pero que encierran una gran carga emocional. En este proceso creativo es donde la artista encuentra la magia de transformar lo cotidiano en algo extraordinario.