En la década de 1990, Asturias se resentiría  tras la conocida Reconversión Industrial que supuso la reducción y cese de su industria, parte inequívoca de su identidad colectiva a lo largo del pasado siglo. Esta afección calaría hasta su organización socioeconómica, zarandeando la escena cultural de la región.

Al igual que sucedería en grandes ciudades postindustriales a nivel nacional e internacional, en Asturias se dieron paso relevantes escenas subalternas que reflejaron la agitación de una generación. Una de ellas fue la escena musical, y más en concreto la electrónica, que se expandiría por un territorio huérfano a la vez que permeable.

De manera paralela a la imagen de optimismo y transición económica nacional, el proyecto persigue trazar una cartografía de estas escenas traseras de la región, entendidas como parte de la cultura de una delicada época. Sus condiciones cotidianas e incomprendidas surgieron en salas de fiestas o locales, pero también en sótanos, naves o grandes estructuras industriales abandonadas. Un cierto carácter eventual, invisible e intenso, que adelantaba un disfrute colectivo y en cierta medida disidente, en contraposición al  conformismo de la hedonista sociedad postindustrial.

Proyecto seleccionado en la I Convocatoria de Residencias Arísticas 2022