A striped stain painting that zig zagged from the ceiling of Praz-Delavallade widening to attach into a 60 car grille on the floor…

Jim Shaw

11 Abril 1999

Acrílico sobre lona y calandria de Ford Mercury 66. 66 x 600 x 200 cm Cortesía: Collection Frac Aquitaine, Burdeos

La cultura material, el arte pop y la contracultura se dan la mano en esta obra de Jim Shaw. Un automóvil que aparece formado por la síntesis de dos simples elementos: la materialidad del frontal de un coche (que no deja de ser uno de los motivos más utilizados por el arte pop) y el vuelo onírico de una tela pintada. Un cruce de materia y sueño en el que el automóvil se mueve entre realidad e imaginación, cultura comercial y cultura alternativa. Si el automóvil se ha ido conformando a lo largo de la segunda mitad del siglo XX como un producto destacado de la cultura de masas y un referente cultural colectivo, la respuesta de Jim Shaw es depositar sobre él un juego cruzado de referentes estéticos y culturales capaz de desvelar y despertar nuestra capacidad de apropiación individual.