Desde hace ocho años, poco después de que los asturianos me encargaran el gobierno de la Comunidad, he tratado de convertir la Universidad Laboral de Gijón en un lugar de referencia en el mundo de la creación y la innovación, que combinara todos aquellos aspectos novedosos del nuevo paradigma del crecimiento sostenible que la sociedad del Principado ha logrado poner en pie. Eso, y la comprensión y el interés ciudadano por esa recuperación, han hecho posible un amplio apoyo al proyecto, más allá de cualquier duda, entre nosotros.
Laboral Ciudad de la Cultura, casi un hecho ya, reúne un conjunto de instalaciones y servicios que, si trabajan inteligentemente juntas, aportarán nueva riqueza al territorio y nuevo saber hacer a muchos miles de personas. Y en su marco, como factor esencial, LABoral, el Centro de Arte y Creación Industrial más ambicioso de la península en sus instalaciones y en sus programas, abría sus puertas hace unos pocos meses para sorprender, agradar y provocar la respuesta creativa entre nosotros. Pero esa no era su principal misión: siempre dije que los creadores y creadoras de nuestra tierra dispondrían con el Centro de un nuevo y rico recurso para su promoción y visibilidad.
Tanto la presencia entre nosotros de los líderes de la opinión mundial en el mercado del arte, como la continua llegada de responsables de exposiciones e instituciones contemporáneas internacionales a visitarnos nos facilita una puerta y ventana amplias para hacer ver la calidad y cantidad de nuestra creación. En esta encrucijada histórica Asturias ya ha echado a andar. Con paso firme. Y, en su campo, la actual muestra presente en muy diversas localidades asturianas, Extensiones-Anclajes, da un primer paso asentado en esa dirección. Ha llamado y llama la atención sobre la creación contemporánea en lugares no habituales, genera la controversia creativa estimulante que muchas de las piezas presentadas se proponen y hace visibles, en el contexto internacional en el que LABoral se posiciona, a los artistas asturianos contemporáneos que forman parte de la iniciativa. Algunos de ellos incluso han tenido ya respuestas positivas de personas e instituciones internacionales, atraídas por su trabajo en las localizaciones previstas.
Late en el arte y la creación asturiana una pulsión de cambio. Un cambio que podemos entender mejor en el contexto de los cambios culturales de una sociedad, la nuestra, que ha visto en menos de dos décadas transformarse definitivamente su modelo productivo, y que hoy está, tras elegir su camino posible, en las sendas firmes de las nuevas industrias, la diversificación y el aprovechamiento de la inteligencia y del saber hacer como motores esenciales de una comunidad más rica y menos desigual. Sin este nuevo escenario, que se consolida día a día con nuevas iniciativas de creciente valor añadido que entroncan con nuestra mejor tradición histórica, sería difícil imaginar siquiera la existencia o el sentido de un proyecto como LABoral Centro de Arte y Creación Industrial. Lo intangible, la imaginación creativa y el poder de las ideas se convierten en un activo sustantivo a desarrollar entre nosotros. Y Extensiones-Anclajes,en sus dos fases que este catálogo documenta, presenta un conjunto de propuestas que muestran cuán relevante puede ser la tarea de la creación asturiana contemporánea para avanzar en esta dirección firme, más allá ya de la encrucijada superada.