Esculturas sonoras. Dimensiones variables
El mundo que habitamos es un lugar doloroso y maravillosamente complejo. Cylinder surge del deseo por plasmar en forma de objeto diseñado algo de esa complejidad. En pocas palabras, es un traductor de sonido a objeto.
Al abandonar la tarea de creación de detalle a la circunstancia, a una interpretación de sonido en un instante particular del tiempo, Cylinder hace posible la producción de un curioso nivel de complejidad que se combina con la abstracción estructural.
Se toman unas “instantáneas” digitales de sonido, que se dividen en bandas de frecuencia representadas en 360 grados. Esas instantáneas se apilan una sobre otra creando un objeto tridimensional virtual, materializado luego en el mundo real mediante la tecnología de prototipado rápido. El objeto resultante será una interpretación permanente y tangible del sonido original, una expresión estática de esa riqueza y detalle que hasta el sonido más simple lleva aparejados. Esta idea de permitir a procesos informáticos o de otra índole un grado de control sobre ciertos detalles encierra un tremendo potencial para la producción de un diseño auténticamente complejo.