«Los juguetes no son tan inocentes como parecen. Los juegos y los juguetes anticipan ideas importantes».
Charles Eames
En los últimos diez años se han multiplicado las iniciativas desde el mundo del arte, la investigación académica y la industria buscando establecer el status del videojuego como medio, y reclamar las posibilidades de lo lúdico como estrategia creativa. LABoral contribuyó a este proceso con la trilogía de exposiciones Gameworld, Playware y Homo Ludens Ludens, quizás la exploración más exhaustiva del tema desde una institución cultural.
Ahora que el interés de los artistas por el videojuego ha dejado de causar sorpresa; ahora que numerosas universidades cuentan con departamentos de Game Studies y el movimiento de los Juegos Independientes está encontrando un espacio y un público propio ¿cuales son los nuevos límites del juego como lenguaje y cómo industria?
Arcadia: Juegos desde una cultura de la Innovación es un observatorio que sondea las principales líneas de investigación que se están siguiendo hoy en los distintos ámbitos de la cultura lúdica contemporánea; del diseño de juguetes al desarrollo independiente de videojuegos, pasando por el gameart y los llamados ‘juegos serios’.
Los más de treinta proyectos seleccionados, producidos en su mayoría en los últimos tres años, son muestra de una sensibilidad emergente que desborda nuestras ideas preconcebidas sobre la función y forma del juego.
Géneros nuevos como los «juegos lentos» de Tale of Tales, que evitan la adrenalina y buscan sumergirnos en atmósferas envolventes. Estudios y diseñadores como Jason Rohrer y Thatgamecompany, cuyos juegos emocionales y turbios se sitúan más allá del imaginario adolescente de los videojuegos comerciales. Experiencias sensuales antinarrativas, como el excepcional Eliss de Steph Thirion… y juegos que editorializan y comentan sobre las crisis contemporáneas sociales, políticas y medioambientales.
Más allá del software, Arcadia se adentra además en territorios como el diseño de producto y gadgets, el juguete y la cultura de la autoconstrucción y el hacking lúdico.
Arcadia es la primera presentación dentro de Mediateca Expandida, un nuevo espacio de LABoral que experimenta con nuevos formatos de presentación que fomenten la sociabilidad y vayan más allá de la exposición tradicional.
Comisario: José Luis de Vicente
Diseño espacial: Longo + Roldán
Diseño gráfico: The Studio of Fernando Gutiérrez
Presentación Institucional
Uno de los retos y de los logros del arte contemporáneo es que trasciende de los formatos clásicos, físicamente limitados por las dimensiones del espacio y del tiempo, sometidos al discurrir cronológico. De igual forma, el proceso evolutivo del arte ha ido paulatinamente rompiendo con las reglas tradicionales y los cánones clásicos, logrando eliminar la distancia entre espectador y la obra artística, hasta llegar al estadio de disolución, incluso, del propio concepto de “obra”, entendida como realidad palpable e inalterada.
Arcadia es un paso más allá, es una apuesta vanguardista y atrevida, en la que lo lúdico es experiencia artística, el espectador es protagonista teatral, la calle es el lienzo, la ciudad es el itinerario artístico y es el arte en sí misma. Diferentes herramientas e instrumentos son la urdimbre con la que los ciudadanos se hacen arte: fotografía, telefonía móvil, mensajes, video consolas, GPS…La nueva tecnología como artilugio artístico.
Para Cajastur participar en esta iniciativa es, pues, una satisfacción, por lo que supone de atrevimiento, de exploración del universo artístico y de oferta a los ciudadanos de nuevas experiencias. La persona como protagonista y partícipe del arte es un horizonte para el que es preciso realizar un camino del que Cajastur quiere participar, porque, precisamente, ese es uno de los objetivos de las actividades socioculturales de nuestra entidad: llevar el arte al ciudadano, hacer que las manifestaciones artísticas lleguen a todos los rincones de nuestra región y hacer partícipes de la cultura a la sociedad en su conjunto.
Cierto que, y así ha ocurrido históricamente, la vanguardia provoca rechazos, pero no es menos cierto que cuando la participación es el eje vanguardista es atracción lo que se propicia. Cajastur tiene la convicción de que esta iniciativa será un hito en la evolución del concepto artístico y de la permanente búsqueda que significa el trabajo creativo.
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