Gabriel Díaz

Escultor y poeta

Nace en Pamplona, 1968. Vive y trabaja en Madrid

Formado como escultor, Gabriel Díaz  (Pamplona, 1968) comienza a trabajar a principios de los noventa siguiendo la poética del Land Art mediante intervenciones realizadas sobre roca, arena, madera o con pedazos de hielo.

El intento de superación de la forma, de penetrar más allá de la materia y conseguir encontrar algo detrás, es una constante en todo su trabajo; ya sea desde el equilibrio, el desafío de las leyes físicas, la anulación del grosor persiguiendo encontrar su inmaterialidad, o desde la noción del  pasaje o pasadizo, algo que desemboca en un estudio sobre el lugar y el tránsito.

En sus esculturas e instalaciones, suspende piedras en el aire en las que la mirada penetra hasta su interior, las sostiene sobre inverosímiles soportes o las incrusta en la pared, dibuja su superficie o la extensión del firmamento, nos enfrenta al vacío de las tumbas abiertas o nos arrastra hacia el espacio abismal o telúrico.

Además de la escultura, para la que utiliza diferentes materiales como mármol, alabastro o hierro, sin olvidar el vídrio y el metacrilato, Díaz explora otros soportes artísticos, como la fotografía o el vídeo, filmando sus trabajos en cuevas, grutas, agujeros de hielo o desagües de agua para realizar obras que aúnan la predilección por la naturaleza con las nociones de interior/exterior, entrada/salida o vacío/lleno.

A principios de 2000, viaja por primera vez a Tíbet donde realizará diversos trabajos en vídeo sobre lugares naturales sagrados comenzando así una ardua y extensa serie de obras sobre las peregrinaciones en oriente y occidente.

En la actualidad trabaja en un nuevo proyecto con el que retorna a la escultura en piedra.