El dramaturgo Rodrigo García presenta la primera instalación producida por el LABoratorio de Sonido

Se trata de 'Estudio incompleto acerca de mi propia claustrofobia que empezó de repente una noche a mis 41 años en una furgoneta en la ciudad de Seúl’

Published: 21/03/2014
El dramaturgo Rodrigo García presenta la primera instalación producida por el LABoratorio de Sonido

Un momento del montaje de la instalación de Rodrigo García Estudio incompleto acerca de mi propia claustrofobia que empezó de repente una noche a mis 41 años en una furgoneta en la ciudad de Seúl en el LABoratorio de Sonido. Foto: LABoral/Sergio Redruello

LABoral inaugura este viernes, 21 de marzo, Estudio incompleto acerca de mi propia claustrofobia que empezó de repente una noche a mis 41 años en una furgoneta en la ciudad de Seúl, una instalación sonora del dramaturgo astur-argentino Rodrigo García desarrollada durante su residencia en el LABoratorio de Sonido del Centro de Arte y Creación Industrial de Gijón. Se trata de la primera obra producida en este nuevo espacio de Plataforma 0. Centro de Producción, cuyo objetivo es promover y dar soporte técnico y creativo a las prácticas artísticas contemporáneas relacionadas con el sonido a través de cuatro líneas de acción: producción, exposición, investigación y educación.

Coproducida con el Centro Dramático Nacional de Montpellier-Languedoc-Rosellón que dirige el propio Rodrigo García, la instalación se compone de una serie de cascos de moto intervenidos de los que se vale el artista como vehículo narrativo para una pieza en la que, como su mismo nombre indica y como es habitual en su trabajo, lo autobiográfico le sirve de trasunto para explorar ciertos aspectos de nuestra condición humana.

Estudio incompleto acerca de mi propia claustrofobia que empezó de repente una noche a mis 41 años en una furgoneta en la ciudad de Seúl presenta siete ambientes sonoros reactivos que, en respuesta a la respiración y los sonidos producidos cuando el propio usuario se pone un casco, forjan una historia y unas texturas sonoras que van apareciendo y despareciendo. Cada uno de los cascos entraña una configuración y una experiencia de escucha particular generada por medio de una serie de altavoces y transductores de superficie. Las técnicas empleadas en cada casco suponen, en conjunto, una recopilación de las diferentes maneras contemporáneas de trabajar con el sonido, desde la simulación binaural a la síntesis granular, pasando por grabaciones de campo o, también, por diferentes modelos de análisis de audio englobadas dentro del llamado machine listening.

Según Rodrigo García, “el casco de moto es un objeto que tampoco me resulta nada simpático y tal vez por eso lo elegí como el micro-espacio adecuado para meter en él las piezas sonoras; cascos de moto que suenan, cada casco con su historia, con su obsesión, con un sonido que según quién lo reciba podrá acabar siendo un tormento, un juego o un cuento para dormir. El público o receptor hace las obras siempre”.

"Soy artista de teatro, en segundo lugar, dice. Antes soy escritor. Supongo que esta instalación permite ver de dónde vengo, porque estos elementos en el espacio se asemejan a una escenografía teatral y se establece un diálogo de sordos, un sistema de incomunicación”.

Rodrigo García (Buenos Aires, 1964) es director de teatro, dramaturgo y escenógrafo. Fundador de la compañía La Carnicería Teatro, ha vivido en España desde 1986, donde se ha desarrollado principalmente su carrera teatral. Ha colaborado, entre otras instituciones y festivales, con el Centro Dramático Nacional (España), el Festival de Avignon o la Bienal de Venecia. En 2009 recibió el Premio Europa Nueva Realidad Teatral. En la actualidad dirige el Centro Dramático Nacional de Montpellier-Languedoc-Rosellón.

Rodrigo García avanza sobre el campo minado del mundo, lo imita, lo pone a prueba, en tela de juicio, lo exaspera hasta derrumbarlo sobre el del teatro. De tal salpicar peligroso surge un arte frágil e inquieto, de reflexión y de combate. Rechazando la política del avestruz, nos invita a no perder la esperanza en los encantos de la representación. Como prueba de futuras sublevaciones alegres y emancipadoras. Desde hace unos años, sabe enfrentar el éxito y las sirenas de la fama mercantil. Irreductible a la moda que lo rodea y lo alaba para mejor denigrarlo después de que pasó la ola, supo frenar la espiral de una producción exponencial y privilegiar la artesanía de un proceso de creación ahondando siempre más profundo.
http://rodrigogarcia.es

Fechas: 21.03.2014 – 20.04.2014

Producción: LABoral Centro de Arte y Creación Industrial y Centro Dramático Nacional de Montpellier-Languedoc-Rosellón