LABoral explora en 'Estación experimental' cómo el arte y la ciencia imposible se entrecruzan

La exposición permanecerá abierta hasta el 9 de abril de 2012 y es una coproducción entre LABoral y CA2M Centro de Arte Dos de Mayo

Published: 20/10/2011
LABoral explora en 'Estación experimental' cómo el arte y la ciencia imposible se entrecruzan

La obra de O Grivo (Marcos Moreira y Nelson Soares) 'Turntables', 2011. Foto: cortesía de los artistas

Una instalación que genera un tornado en una sala de exposiciones, una manguera que cobra vida propia ante la mirada atónita del espectador, un gato que flota ingrávido en el espacio o un conjunto de extraños instrumentos musicales, realizados con toda clase de materiales reciclados y cuyos sonidos atrapan la atención del visitante, son algunas de las obras que podrán verse a partir del viernes 28 de octubre en LABoral, en la exposición Estación experimental. Investigaciones y fenómenos artísticos.

La muestra es una coproducción entre el Centro de Arte y Creación Industrial y el CA2M Centro de Arte Dos de Mayo de la Comunidad de Madrid y hasta el 9 de abril de 2012 reunirá en Gijón obras de 28 artistas internacionales, nacidos en su mayoría entre los años 70 y 80, para los cuales la razón de su trabajo es un impulso irrefrenable que les conecta con la parte más pura de la investigación científica.

Comisariada por Virginia Torrente y Andrés Mengs, Estación experimental explora cómo el arte y la ciencia imposible se acercan y entrecruzan. Y lo hace a través del trabajo de una serie de creadores que, desviándose de las directrices preestablecidas en el arte contemporáneo, comparten en su trabajo una cierta fascinación por temas extra-artísticos; por lo que sucede dentro del campo de lo real, pero también en el más allá, encontrando lugares comunes entre lo inverosímil o, como mínimo, lo improbable. De ese modo, las obras presentadas se detienen en el cortocircuito que generan los cruces de las ficciones teóricas con las ficciones estéticas y el resultado es un territorio de nadie en el que se inventan nuevas reglas.

La exposición no se plantea como un análisis minucioso del conjunto de la ciencia, ni de sus actuales logros, aspiraciones y frustraciones. En ese sentido no es una exposición al uso sobre las relaciones entre arte y ciencia. Por el contrario, desplaza su atención hacia lo inverosímil o, como mínimo, lo improbable. Huye también de la identificación de la ciencia con la sofisticación tecnológica: de hecho, muchos de los trabajos presentes rayan en el bricolaje doméstico.

Con motivo de la exposición, se ha publicado un catálogo bilingüe español-inglés con un ensayo de Pablo Martín Pascual. Además, para la exposición de LABoral, se ha habilitado una Sala de Interpretación en la que se muestra abundante material vídeo-gráfico sobre los diferentes grupos, con explicaciones de los artistas sobre sus obras. Se incluyen también entrevistas con los comisarios Virginia Torrente y Andrés Mengs, acerca del concepto de la misma, y de Pablo Martín Pascual. Junto a ello, un vídeo documenta el proceso de montaje de Estación experimental en el CA2M y se presenta abundante bibliografía sobre las relaciones entre arte y ciencia y otras cuestiones que aborda la exposición.

CUATRO APARTADOS
Las obras de Estación experimental se agrupan en cuatro apartados. Dos de los trabajos -de Luis Bisbe y Esther Mañas y Arash Moori- son proyectos site-specific, producidos especialmente por el Centro de Arte de Gijón para la exposición que ahora se presenta en LABoral.

Artefactos y mecanismos
Julio Adán, Guillem Bayo, Ingrid Buchwald, Milton Marques, O Grivo, Ariel Schlesinger y Alberto Tadiello.

En la estela renacentista, con muchas cosas todavía por descubrir, los artistas de este apartado se interesan por la creación mediante artilugios mecánicos o por la derivación a otros usos de la tecnología existente. Tanto mecánica como tecnología pueden ser útiles para dibujar (Julio Adán) y también para llamar la atención del espectador mediante sus sonidos (Alberto Tadiello y O Grivo).

En el laboratorio
Luis Bisbe, Carlos Bunga, Caleb Charland, Alistair McClymont, Rubén Ramos Balsa y Ben Woodeson.

En el laboratorio reúne a aquellos creadores que usan el estudio de artista, o el lugar expositivo, como lugar de experimentación. Desde el que utiliza el garaje para fotografiar experimentos caseros (Caleb Charland), o el que en un vídeo presenta una prueba difícil de superar por no decir imposible (Carlos Bunga), hasta el que hace un tornado en un interior (Alistair McClymont), pasando por el que pone a prueba el recorrido del espectador en la sala (Ben Woodeson), y el que de verdad trabaja a las órdenes de un científico para explicar su teoría física mediante un vídeo y una maqueta (Rubén Ramos Balsa).

Perdidos en el espacio
David Clarkson,  Björn Dahlem, Karlos Gil, Lyn Hagan,  Kiluanji Kia Henda; Esther Mañas & Arash Moori,  Paloma Polo, Jan Tichy y Raphaël Zarka.

Una de las últimas fronteras científicas sigue siendo el espacio exterior, que es fuente de investigaciones rigurosas y teorías por confirmar, a la vez que campo expandido para la ciencia ficción. Desde el rigor de la investigación (Paloma Polo) hasta el archivo infinito sobre ciencia ficción (Karlos Gil) hay terreno para otras aproximaciones de corte variado,  desde la más experimental (Esther Mañas y Arash Moori) al documental (Raphaël Zarka).

Trabajo de campo
Alberto Baraya,  Faivovich & Goldberg,  João María Gusmão y Pedro Paíva, Ilana Halperin, Rivane Neuenschwander & Cao Guimarães y Jorge Peris.

Trabajo de campo aglutina a los artistas que salen al exterior a reunir datos o elaborar y demostrar teorías que mezclan el arte, la ciencia y la naturaleza. Plantas artificiales  (Alberto Baraya), historia de los meteoritos y sus descubrimientos (Faivovich & Goldberg), geología y vulcanismo (Ilana Halperin), desiertos de sal (Jorge Peris) son algunos de los lugares donde se han desarrollado y creado algunas de las piezas presentes en Estación experimental.