Table d’harmonie, 2010
Instalación sonora, polvo de corindón negro, 16 altavoces coaxiales, reproductores de DVD, mesas de mezclas, amplificadores. Dimensiones variables
Cortesía de Galerie Frédéric Giroux
© Pascal Broccolichi
Realizada con apoyo del Instituto francés en Bilbao
Table d’harmonie es una curiosa pieza sonora cuya pureza formal nos remite tanto a la instalación minimalista como a ese patrón repetitivo que se dibuja en una perspectiva totalizadora. Concebida como un paisaje sonoro artificial, aunque la imagen de Table d’harmonie se articula como el horizonte que divide cielo y tierra, pronto se establece una resonancia entre el sonido y la masa negra del dibujo, con el corindón negro extendiéndose sobre el suelo para componer unos cráteres totalmente regulares.
Dentro de cada cráter se ha situado un altavoz. La composición de la pieza sonora se realiza con ayuda de un programa de software de “síntesis granular” que simula los patrones del flujo sonoro en movimiento.
Sin llegar a la abstracción, los sonidos e imágenes eluden cualquier tipo de narrativa. Mediante la combinación de sonido y presencia visual de la instalación, el visitante experimenta, paradójicamente, su propia relación en el tiempo y el espacio, fundiendo la experiencia sensorial con los sistemas de representación concreta que conforman la definición, eminentemente compleja, de cualquier lugar.