Kitchen Architecture MK 2, 2008
Las obras de Bruce Bell juegan con la escala y su distorsión. Desafían nuestra percepción de los objetos en miniatura al colocarlos en un contexto a escala real y explora los límites entre los objetos y el entorno diseñado. ¿En qué momento una maqueta se convierte en producto, en entidad por sí misma? ¿En qué momento la arquitectura deja paso al edificio en sí? Por otro lado, los niños crean espacios de juego de forma instintiva; sus espacios están mucho menos definidos en términos de escala que los espacios que creamos en el mundo de los adultos. Algo parecido sucede con estas maquetas: juegan con la arquitectura, crean formas espaciales sin tener que pasar por las complicaciones asociadas al diseño de planos, a los costes, a las cuestiones estructurales o al uso. Kitchen Architecture sigue un patrón muy similar: sus estantes están apilados como si de un aparcamiento de varias plantas se tratara.