Elgiroeneleje
Una exposición que pretende revisar las diferentes formas que los artistas tienen de abordar el ciberespacio acabará por fuerza adentrándose en el territorio de la realidad virtual (RV) y las pantallas estereoscópicas tridimensionales.
La RV ha sido siempre uno de los grandes hilos narrativos de la era digital. Enormemente sobredimensionada durante los años noventa y lastrada por el peso de más expectativas de las deseables, su incapacidad para satisfacer las esperanzas que había suscitado hizo que fuera pronto vista por muchos como un estrepitoso fracaso.
Sin embargo, si tenemos en cuenta los miles de millones que genera hoy la industria de los juegos de ordenador comerciales o los más de ocho millones de personas que habrían participado en el juego multiusuarioWorld of Warcraft, no nos quedará otro remedio que admitir que, aun materializándose en forma diferente, la VR ha superado con creces las expectativas iniciales.
Algo parecido cabe aplicar a la descripción de las actividades artísticas que tienen lugar en este campo. Los primeros ejemplos dieron pie a grandes expectativas, pero la tecnología para la producción y exposición de esas obras continuó siendo muy cara y escasa durante mucho tiempo, por lo que sólo unos pocos creadores pudieron experimentar con el potencial de la tecnología.
Sin embargo, el auge de los juegos de ordenador hizo que, de repente, los potentes motores de gráficos en tiempo real se convirtieran en productos económicos y de fácil acceso, un fenómeno que trajo a la vez consigo la aparición de nuevas herramientas de software de fácil aprendizaje y manejo.
Por todo ello, la alta calidad gráfica está hoy al alcance de todos los ordenadores y hasta los niños de doce años crean ya sus propios entornos virtuales y juegos de ordenador.
Pero el potencial artístico de la RV a gran escala está aún por demostrarse. Aparte de algunas sorprendentes experiencias visuales, se debería prestar una atención especial a la exploración de las posibilidades narrativas y fílmicas de la RV y de la animación en tiempo real.
En este sentido, nos encontramos con la denominada tendencia Machinima (usuarios que hacen un (mal)-uso del software destinado normalmente al desarrollo de juegos de ordenador para crear sus propias animaciones o cortometrajes).
Sin embargo, los lazos que unen al mundo del arte con las comunidades Machinima –dotadas, por lo general, de una mayor orientación tecnológica- son todavía escasos
En este contexto, la obra de Gabriel González Serrano constituye toda una promesa. A lo largo de un proceso de trabajo de varios años, el artista ha desarrollado su propia visión de un mundo virtual en el marco de una obra que se ha convertido al mismo tiempo en un intenso y minucioso combate en contra de los tópicos del arte digital.
La referencia a los lenguajes visuales que conocemos por los juegos de ordenador o gracias al cine de ciencia ficción resulta inevitable cuando se trabaja con esta herramienta técnica (los parámetros y las limitaciones técnicas siguen siendo determinantes). Pero lo que hace de Elgiroenelejeuna obra excepcionalmente diferente desde el primer momento es que no parte de los polígonos ni de texturas del paisaje sino de la presentación de un mundo que gira alrededor del personaje principal.
Un personaje que deambula por un mundo que es representación y prolongación de su propio mundo interior ("un giro de la conciencia") y, en palabras de Gabriel González Serrano: "El final de un poema terapéutico y el comienzo de una oda al universo… He intentado modestamente testimoniar mi propio proceso como ser humano desde mi papel de "creador". Mi evolución personal, mis experiencias, mis aprendizajes y mis cambios como ser humano son siempre la referencia de la obra.
Por ello, Elgiroeneleje muestra mi evolución como ser humano durante los últimos años sin aspirar a investigar teorías innovadoras, revolucionarios conceptos artísticos, propuestas enormemente sofisticadas o un metalenguaje más próximo al cinismo contemporáneo que al compromiso real con el trabajo artístico. Un compromiso que no excluye las emociones, los sentimientos, ni siquiera el alma. Bienvenidos a Elgiroeneleje".
