Lost in Translation
Por Frédéric Emprou
El término «traslación» procede en concreto de la geometría y designa la acción de llevar de un lugar a otro o de desplazar algo o a alguien. En el vocabulario 3D se utiliza para indicar el movimiento de un objeto paralelamente a un eje. También puede ser un falso amigo lingüístico, entre el francés, el español y el inglés, de la palabra «traducción».
Fruto de un encuentro entre artistas de Nantes y de Asturias, la exposición Traslaciones pretende explorar diferentes dimensiones de esta expresión. La idea de traslación puede así interpretarse por medio de datos temporales, geográficos o mentales. Traslaciones experimenta, en las salas de LABoral Centro de Arte y Creación Industrial y el Centro de Cultura Antiguo Instituto, a partir de las obras de Neal Beggs, Regina Dejiménez, Bevis Martin, Charlie Youle y Fran Meana, las ambigüedades de ese movimiento y de esa mirada. Traslaciones trata de formular, en modo deslizamiento, correspondencias entre una memoria y un contexto. La ciudad de Gijón, su historia política, económica y obrera, su inscripción oceánica y su relieve conforman el soporte y el telón de fondo de esta investigación2.
La exposición, que reúne entidades plásticas muy diferentes, adopta los perfiles de prácticas que tienen en común una cierta relación con el fragmento y el flujo. Neal Beggs, vincula el viaje con la cartografía, la captación musical, el lugar de transformación ligado a un entorno y el tradicional white cube (cubo blanco) de una exposición. En el trabajo de Regina Dejiménez, el interés hacia el elemento natural, y también hacia la ciencia, se improvisa a modo de alquimia y de cambio de estado de la materia. Las cerámicas de Bevis Martin y Charlie Youle se mantienen en un juego de confusión entre perspectivas euclidianas y referencias históricas del arte. Y Fran Meana, por su parte, utiliza aquí como pretexto el relato literario de anticipación para confeccionar una obra sonora portadora de evocaciones visuales.
Piraterías o proyecciones híbridas, estas iconografías nómadas que destilan lo verdadero y lo falso pueden emparentarse con un mapeado o navegación, tal como se entiende en la esfera de las nuevas tecnologías. Las obras realizadas para Traslaciones aúnan modos de producción y técnicas de fabricación y también experimentan diálogos entre formas brutas y programas de modelización. Mezcla entre folk y hardware, antiguo y high tech, las producciones de los cuatro artistas, gestadas durante su residencia de producción, recurren tanto a la impresión 3D como al concepto de réplica. Traslaciones, a modo de cuestionamiento de interferencias actuales sustentadas por las nuevas ingenierías de la comunicación y la información, opta por la lógica que muta y descarrila en sentido propio y figurado3.
Tras esa noción de desfase que se aprehende por un procedimiento físico y material, late la idea de analogías y narraciones sin finales ni principios, de modo que la anamorfosis hace las veces de llave óptica de la exposición. Esas temporalidades mixtas que habitan los objetos artesanales de museos revisitados por el tándem Martin y Youle pueden vincularse con la relación que Neal Beggs estableció entre la guerra de España y la canción pop, por ejemplo. La instalación y el dispositivo vocal de Fran Meana y la confusión que provoca un monólogo procedente de ninguna parte, pueden relacionarse con la escenografía realizada por Regina Dejiménez en la que se elaboran simbologías y una lectura que roza el espiritismo.
Máquina de viajar en todas sus formas, clásicamente identificada con el espacio lejano y el periplo de largo recorrido, el desplazamiento se relacionó durante mucho tiempo con un generador de potenciales relatos fluctuantes entre fantasía y autenticidad, ensoñaciones y verdades. Como contrapunto, a modo de exilio inventado, Traslaciones se presenta como una alegoría de esta época en la que parece que las distancias menguan y el tiempo se achata.
Impulsar movimientos en paralelo, interpretar y justificar una historia cultural, son los horizontes que la exposición activa, creando ficciones a partir de diferentes realidades. Las obras de Neal Beggs, Regina Dejiménez, Bevis Martin, Charlie Youle y Fran Meana, priorizando lo virtual y el trampantojo, hablan del mundo mostrando al espectador tipos de percepciones desgajadas.
Traslaciones reivindica, a la medida de una dimensión contemporánea posible, la pérdida de puntos de referencia y de definición como se haría con una representación o una geometría improbable. La exposición pretende, pues, que el visitante se convierta en el pasajero de esta especie de pop ciencia ficción iconoclasta: con una sensación esquizofrénica que parece sugerir que el tiempo se mueve sin haber cambiado de sitio.
NOTAS
1. Novalis, Le brouillon général, Allia, Paris 2000.
2. «… lo que ibais a comprobar en los viajes es que el mundo está interpretando para el cine, lo hace constantemente, y la televisión es eso, la interpretación para el cine del mundo entero; de modo que viajar es ir a ver “a qué momento de la historia de los medios de comunicación” pertenece la ciudad, una ciudad concreta». Gilles Deleuze, Lettre à Serge Daney, optimisme, pessimisme et voyage, in Pourparlers, les éditions de Minuit, 1990.
3. «Pero para conseguir ver con el fin de mostrar, hay que encontrar ángulos de mirada, experimentar, mover los límites admitidos, desplazar la observación por el espacio y el tiempo». Marc Augé, L’art du décalage, in Multitudes Web, junio 2007.
