Software libre abriendo las fronteras del arte

El software libre es una herramienta muy utilizada en la práctica contemporánea. Una introducción a estas tecnologías pueden hacerse a través de los talleres formativos que celebra LABoral

Published: 23/07/2015
Software libre abriendo las fronteras del arte

Fuente: Web de Arduino

Por Nati Guil Grund (@musas20), Musas20

Que un festival de arte y tecnología como Ars Electronica adjudicara, en septiembre de 1999, el premio del jurado al sistema operativo GNU/Linux (desarrollado en colaboración por una comunidad de programadores), convirtió automáticamente al Linux en una obra de arte.

Este hecho propició la relación que muchas veces se establece entre la práctica del arte vanguardista y la producción del software libre. En este artículo vamos a tratar su uso en el arte contemporáneo y la importancia que adquieren proyectos formativos, como los que se imparten desde LABoral Centro de Arte y Creación Industrial.

Durante los últimos años los artistas se han acercado a la tecnología digital de maneras muy diferentes: para explorar sus posibilidades estéticas inéditas, para subvertir los usos que originariamente les dieron y hackearlas para sus propios fines. También para revelar las ideologías que se esconden tras sus interfaces y abrir la conversación sobre su función política. Todo esto no sería posible, o sería mucho más complicado, sin el software libre.

Un ejemplo es la aclamada obra realizada con estas tecnologías Naked on Pluto (Desnudo en Plutón), desarrollado por Aymeric Mansoux, Marloes de Valk y Dave Griffiths, un juego online muy divertido, basado en un texto que gira en torno a los problemas de la privacidad en la red y al uso (indebido) de los datos personales. Siete robots de inteligencia artificial interactúan con el jugador, que trata de evadirse de un perturbador entorno conocido como Elastic Versailles, mientras el sistema solicita información continuamente.

 

Imagen página web del juego Naked on Pluto

 

Para saber qué puede aportar el software libre a la práctica artística, debemos entender su naturaleza, ya que éste sirve para hacer lo mismo (en principio) que con su equivalente comercial. La idea del software libre tiene que ver, más que con el precio o la funcionalidad, con la libertad: libertad de uso, libertad para estudiar el software y hacer modificaciones, libertad de copia, libertad para volver a distribuir las mejoras.

El hecho de ser abierto y no poner los límites fomenta la experimentación a la hora de crear nuevos proyectos. Hemos hablado de este tema con David Pello y Luis Díaz, de fabLAB Asturias, que asesoran el desarrollo de proyectos artísticos a los residentes que acuden al Centro de Arte y trabajan con software y hardware libre.

Nos cuentan que "todo lo que se realiza en LABoral, tanto el software como los diseños, se publica con licencias libres. Por ejemplo en el caso de los diseños se utiliza el Creative Commons". Es decir, cualquier otra persona puede usarlos en otros proyectos, sean artísticos o no, así como modificar lo existente. Esto es un cambio en relación con el mundo del arte convencional, ya que se producen herramientas artísticas innovadoras "más transparentes y accesibles".

Una de las obras, 200 metros de Andy Gracie, fue realizada en una de estas residencias artísticas, convocada en este caso por el Centro de Arte y la Autoridad Portuaria de Gijón. El proyecto consiste en sumergir a 200 metros bajo el mar una sonda submarina que recorre el interior del cañón de Avilés. Dotada con una cámara y sensores, obtiene datos (lumínicos, sonoros…) de ese límite entre el mar y el mar profundo; entre el lugar habitable por la flora y la fauna marina y el mundo desconocido e inhabitable 1.

 

Barquilla con ecosonda desarrollada en fabLAB Asturias para el proyecto de Andy Gracie '200 metros'. Imagen: LABoral

 

El software libre está planteando una serie de desafíos al arte contemporáneo, como es el caso de las licencias que comentábamos, y también cómo encajaría con el mercado del arte. Una obra de estas características se puede vender, pero quizás requiera un ajuste en la mentalidad de los galeristas y coleccionistas, así como la voluntad de aceptar nuevas ideas de autoría y propiedad conjunta.

David Pello nos comenta que no debería haber ningún problema, ya que por ejemplo "todo lo que se desarrolla en el fabLAB, se publica como software libre, pero muchas veces es una pequeña parte del proyecto, por lo que normalmente no entra en conflicto. En ocasiones es incluso un prototipo y ya es cuestión del artista el cerrarlo o no.

Una de las grandes ventajas del software libre es que generalmente está muy bien documentado y tiene una gran comunidad detrás que puede ayudarnos a resolver problemas o dudas. Además utiliza formatos abiertos, lo que a la hora de trabajar facilita y ahorra mucho esfuerzo. Aunque a veces la herramienta no es tan potente como una propietaria, en la mayoría de los casos es suficiente.

Pero no es solo una cuestión práctica, también hay una importante filosofía relacionada con el compartir y el sentido de participar en la comunidad. Las comunidades de código abierto reducen las barreras de entrada por lo que se crean ecosistemas en los que la gente tiende a compartir y enseñar sus creaciones como forma de devolver a la comunidad lo que la comunidad les ha dado.

Este tipo de relaciones genera sinergias entre artistas, técnicos e ingenieros. Además infunde una energía mayor en el discurso artístico, una voluntad de experimentar públicamente y una capacidad colectiva que hace que grandes proyectos sean más fáciles de realizar y llevar a cabo.

La formación en este aspecto es muy importante. David Pello habla de que en la enseñanza reglada encuentras un amplio abanico formativo relacionado con la ingeniería, electrónica o programación:  "Y también, a la hora de hacer pequeñas cosas útiles, existen muchos libros y documentación o vídeos en internet que te facilita la información"En este sentido los cursos de LABoral Centro de Arte se convierte en una oportunidad de primera mano para conocer estas herramientas, con un enfoque muy práctico de "aprender haciendo". La idea es que los participantes se vayan con una base que les permita seguir trabajando. entre otros talleres de hardware libre, este año se ha programado uno dedicado a Rasperri Pi y otro a Arduino. También el próximo Winterlab ofrecerán un curso de Programación creativa con Processing.

Para aquellos que no estéis familiarizados con este dispositivo, Rasperri Pi es un ordenador de pequeñas dimensiones y bajo coste. Se puede obtener por un poco más de 30 euros. Ha sido desarrollado por un grupo de la Universidad de Cambridge con el fin de fomentar la enseñanza de las ciencias de la computación en los niños. Es un ordenador muy funcional y debido a su tamaño puede utilizarse para muchos otros propósitos. Eso sí, hay que tener algunas ideas sobre programación o de computación.

Dividido en dos bloques (del 7 al 28 de noviembre de 2015 se celebra el taller avanzado) además de adentrarnos en el entorno de Rasperri Pi, enseñan el lenguaje de programación Python (que te permite realizar programas informáticos para cualquier entorno y es una buena opción para iniciarse).

Todos hemos escuchado hablar de Arduino, con el que parece que hacer cualquier cosa es posible. Arduino es una plataforma de hardware libre basada en una placa con un microcontrolador diseñada para facilitar el uso de la electrónica en proyectos multidisciplinares. No mide más que una tarjeta de crédito y su precio no supera los 60 euros.

En esencia, se trata de un minicontrolador (algo así como un pequeño ordenador que se encuentra dentro de innumerables electrodomésticos y dispositivos electrónicos, desde televisores y microondas a coches teledirigidos). Estos chips no tienen la potencia de un procesador (como los que se encuentran en un PC o Mac), pero pueden realizar muchas de sus funciones básicas, desde ejecutar programas sencillos a controlar dispositivos: como motores o sensores capaces de detectar la temperatura y el movimiento. Arduino se ha convertido en una infraestructura básica para las prácticas artísticas de hoy.

El taller avanzado de Arduino de LABoral se celebrará del 5 al 19 de diciembre de 2015.

En el caso de Processing se trata de un lenguaje y un entorno de programación ideado para facilitar el aprendizaje de la programación en un contexto visual. Según describe un artículo de Nick Bilton para el periódico The New York Times, “dos de las más importantes introducciones para el arte dentro de los últimos 20 años ha sido el Arduino y Processing2. Processing un programa que puede interactuar con Arduino y con un ordenador tradicional.

 

Programación creativa con Processing

Imagen: Lali Barrière Fuente: LABoral

 

Este taller se celebrará dentro del programa de Winterlab el 14 y 15 de noviembre de 2015.

Cualquiera puede participar en estos talleres. No hay un perfil específico y no requiere conocimientos técnicos o formación en este área, así que tanto si tienes una idea concreta de algo que quieras realizar, como si lo que quieres es experimentar con estas nuevas herramientas y ver qué se podría hacer, estos talleres se convierten en una excelente opción.

El software libre se ha convertido en un gran aliado del arte. Herramientas como Arduino, Rasperri Pi o Processing están siendo utilizadas de manera intensiva. Como nos comenta David Pello, el hecho de ser herramientas abiertas, desarrolladas de una manera colaborativa, que se ajustan a las necesidades de los propios usuarios y que la comunidad que las utiliza comparta los procesos de trabajo es un ejemplo muy claro de todo lo que aporta el software libre a la práctica artística.

 

1. Para más información sobre este proyecto leer el artículo publicando en LABblog por Jose Luis Calderón http://www.laboralcentrodearte.org/es/files/2013/bloglaboral/a-pocos-metros-entre-el-arte-y-la-ciencia

2. http://www.nytimes.com/2011/03/17/arts/design/arduinos-provide-interactive-exhibits-for-about-30.html?_r=1