Sobre el coleccionismo y el mecenazgo

Algunas reflexiones sobre la importancia del coleccionista y el mecenas en las instituciones y en la producción artística hoy

Published: 14/10/2015
Sobre el coleccionismo y el mecenazgo

Antoni Muntadas. "On Translation" (1995-2011).

Por Semíramis González (@semiramis_glez), Semíramis en Babilonia.

Últimamente se habla mucho de cuestiones como el coleccionismo y el mecenazgo, sobre la importancia de ambas actividades en el marco del arte actual, especialmente en los últimos años, cuando las aportaciones públicas para la producción, creación o exhibición se han visto mermadas.

Si bien ambos conceptos no son exactamente lo mismo, sí es cierto que suelen provenir de una misma persona: el coleccionista-mecenas, esa persona que destina parte de su presupuesto para favorecer la creación. Lo puede hacer a través de una compra continuada de piezas artísticas, formando así una colección que comenzará siendo modesta hasta ir teniendo mayor envergadura. Muchos coleccionistas confiesan que reconocieron que tenían una colección “cuando ya no entraban todas las obras en casa”. Pero también pueden ayudar a producir obras con partidas concretas, actividades puntuales, becas o premios. Hace unos meses hablábamos en este blog, como ejemplo, del caso de la Colección Los Bragales del coleccionista Jaime Sordo, que había hecho posible que la beca LABjoven de LABoral volviera a existir. Recordemos que se trata de una convocatoria de un premio anual, de 9.500 euros, destinados a artistas de menos de 40 años, y que permite la producción de un proyecto artístico experimental (especialmente instalaciones audiovisuales y multimedia), concebidos específicamente para exponer en la Galería de proyectos de LABoral.

En un texto reciente de Fernando Díaz de Quijano en El Cultural resaltaba como ejemplo las políticas llevadas a cabo en Francia en materia de mecenazgo; el autor destaca cómo las colecciones públicas francesas se han enriquecido en los últimos años gracias a los incentivos fiscales. Y es que el concepto de “coleccionismo” y de “mecenazgo” es casi tan antiguo como la noción misma de producción artística, en la que el artista veía posible la consecución de su trabajo gracias al apoyo de un mecenas.

Hoy día, donde el mercado es mucho más complejo con otros agentes implicados como galerías, comisarios, marchantes, ferias, etc. la figura del coleccionista sigue siendo igualmente necesaria; más si cabe en la última década, donde ha ido conquistando un sitio propio gracias a la cercana relación todos estos otros agentes.

Y en los museos y centros de arte, donde las partidas presupuestarias se han visto mermadas, ha sido el apoyo de instituciones privadas lo que ha permitido que sigan existiendo determinadas becas, exposiciones y premios.

Desde LABjoven_Los Bragales, como hemos visto, a la beca de producción DKV Seguros – Álvarez Margaride (también en LABoral), la beca DKV – MARCO, el Premio a la Producción Artística Fundación Banco Santander (en Open Studio), o Comisart de Obra Social “la Caixa” para repensar su colección.

En las ferias se asienta cada vez más este apoyo decidido por consolidar el coleccionismo y fomentar nuevos coleccionistas; la presente edición de la feria Estampa sirvió como ejemplo, donde el lema era precisamente este, el coleccionismo y su afianzamiento, teniendo en cuenta y poniendo en valor la calidad de quienes coleccionan en el ámbito ibérico. Y es que las comparaciones siempre son odiosas, y aunque sea adecuado tener miras a todo lo que sucede fuera de nuestras fronteras, es igualmente necesario afianzar y construir sobre las colecciones privadas que existen en España y Portugal, y que son, en la mayor parte de los casos, las que comprar a artistas españoles en las ferias. Es por ello importante señalar la labor de asociaciones como 9915, que desde hace unos años trabaja por revalorizar la labora de los coleccionistas privados.

 

Visita "De la mano de un coleccionista" con el coleccionista Francisco Jaramillo en Estampa 2015.


Una labor que se construye poco a poco y entre todos, haciendo posible que la gran máquina del sistema del arte funcione con los apoyos de unos y otros para que las obras de arte que se están creando hoy sean parte de nuestro patrimonio común el día de mañana.