El “new media art” de Enrique Radigales. Entre lo físico y lo virtual

Conversaciones y reflexiones con Enrique Radigales con motivo de sus dos últimos proyectos en LABoral Centro de Arte

Published: 24/03/2014
El “new media art” de Enrique Radigales. Entre lo físico y lo virtual

Panorámica de 'Primer Diagnóstico Taxonómico' de Enrique Radigales

Por José Luis CalderónNicola Mariani Arte y Sociedad

El pasado 14 de marzo se inauguró en LABoral Centro de Arte de Gijón la exposición Datascape, en la que varias obras de doce grandes artistas del new media art reflejan las relaciones del paisaje con los últimos medios tecnológicos. Entre ellos, el artista Enrique Radigales (Zaragoza, 1970) adquiere un papel fundamental, no solo porque gran parte de su obra versa sobre esta temática, sino porque es uno de los artistas en residencia en este año en LABoral.

Al igual que en otras ocasiones con otros artistas del new media, Net.art, arte tecnológico, digital o como queramos llamarlo, quiero recalcar el hecho de que habitualmente no somos conscientes de la esencia y de la magnitud de estas obras hasta que el propio artista nos explica el sentido de sus obras. Como decía uno de mis antiguos profesores universitarios, “solo hay cultura donde hay cultura”. Es decir: determinados códigos culturales sólo son descifrables para nosotros cuando los conocemos, o dicho de otra manera, lo que a veces no apreciamos justamente es fruto del desconocimiento.

Detalle de Primer Diagnóstico Taxonómico de Enrique Radigales

Uno de los hechos que más he valorado tras mis conversaciones con Enrique Radigales en estos días ha sido precisamente su inteligencia, su capacidad discursiva y su preocupación por hacer inteligibles sus investigaciones de la manera más sencilla posible. Con estas líneas, trascribo algunos extractos de mis conversaciones con él, intentando reflejar la esencia de los dos proyectos que ha ejecutado Radigales en este tiempo para LABoral: Primer diagnóstico taxonómico (para la exposición Datascape) y Totem evanescente, obra resultado de su residencia de tres semanas en LABoral.

Lo primero que tendríamos que preguntarnos es sobre qué trata la obra de Radigales o cuál es su esencia: “Mi trabajo como artista investiga la frontera entre lo analogico (o físico) y lo digital. Considero que es una frontera borrosa; un no lugar que es un campo de experimentación. A través de ese campo podemos descubrir cuál es la relación de los seres humanos con las máquinas, porque hay una barrera difusa. Para traducir estas ideas que pueden ser algo complejas, en mis proyectos me gusta utilizar ideas sencillas".

Enrique Radigales

Su obra para Datascape es el resultado de todo un proyecto de investigación y documentación en el que ha trabajado en este último año: Primer diagnóstico taxonómico. Consiste en interpretar digitalmente un paisaje concreto. No es precisamente una de las primeras veces que Radigales utiliza el tema del paisaje en su obra; más bien, en cambio, lo ha utilizado frecuentemente hasta ahora. Por otra parte, con esta obra, Radigales habla de cómo generalmente el paisaje en el arte está fuera de cualquier consideración geológica real. Utilizo para ilustrarlo, los mismos dos ejemplos que me dio sobre este asunto. Por una parte, los románticos inauguraron el paisaje como género en sí en la pintura. Con ellos se abrió un nuevo concepto del paisaje. Descubrieron que el ser humano podía sentirse minúsculo ante la naturaleza. Friedrich es entre los románticos tal vez el mejor ejemplo. La suya es una percepción concreta del paisaje que nos abre una ventana. Otro concepto y otra ventana diferente del paisaje lo constituye el sistema de representación perspectívica que inauguró L.B. Alberti a comienzos del Renacimiento. Es otra ventana de representación de la realidad.

Friedrich, El caminante frente al mar de niebla, 1818

Llegados a este punto, ¿cómo se relaciona esto con la obra de Radigales y con la tecnología y el mundo digital? “Esto lo podemos trasladar a las ventanas del ordenador. Estas no dejan de ser otras ventanas, que nos muestran paisajes más hostiles. Pero la obsesión o fijación por la tecnología no es algo exclusivo de nuestros tiempos, aunque obviamente ha habido periodos de mayor obsesión. Los futuristas (desde 1909 hasta mediados de la segunda década del siglo XX) estaban ya obsesionados por la máquina. La obsesión por el progreso que tenemos hoy con la tecnología, la tenían ya otros. Hubo un boom con el nacimiento de las .com, pero los nativos tecnológicos, o los que han nacido ya en esta era, no están tan obsesionados con ello” (…)

“En Pimer diagnóstico taxonómico, la idea ha sido digitalizar un paisaje concreto, Pericastó, en la comarca de la Litera, Huesca. Ese terreno tiene dos hectáreas y lo utilizo como anti-taller. Es un terreno que permanece inalterable desde hace siglos, a diferencia de las tecnologías, que avanzan constantemente. Trabajé junto al biólogo Fernando Lampret para que hiciera una taxonomía vegetal: clasificó todas las especies vegetales de ese lugar, de clima seco. Hizo una claisificación de 155 especies diferentes. Después investigué cuáles son los “ciclos de vigor” de esas especies; es decir, cuándo están floreciendo y fructificando. A raíz de esto hicimos un gráfico de esos datos. Y estos gráficos se materializan en píxeles de barro; un píxel por cada especie (malva y romero...)  en doce columnas de barro (una por cada mes del año). Cada píxel de barro representa a una unidad vegetal; no todas están representadas en todos los meses. Hay algunas plantas que solo florecen dos meses; otras florecen todos los meses. Mayo y junio son los meses de mayor “vigor” (las columnas más altas), mientras que diciembre y enero son los meses menos fructíferos, con ausencia de vigor. De esta forma, por ejemplo, el romero que florece y fructifica durante todo el año, tiene un píxel que se repite en los doce meses”.

Columnas de barro de Primer diagnóstico taxonómico de Enrique Radigales

Por otra parte, la base de etas columnas de barro son unas impresiones sobre PVC que representan los colores hexadecimales de cada trimestre. Los colores hexadecimales son los colores web, utilizados en la codificación html. Estos se reducen a 216: “Lo que he hecho en esta obra ha sido traducir los colores de cada una de las especies de estas plantas a colores hexadecimales. Estos colores junto a fotografías del terreno en cada estación del año se pueden ver en los cuatro paños que soportan las columnas. Como si de un plinto irregular se tratara, estos paños impresos digitalmente en lona contrastan con la tosquedad de los píxeles de barro”.

Tanto la investigación como el resultado visual de todo ello, son realmente interesantes, pero hay además un sentido ulterior: “Una de las cosas que más me interesan de este proyecto es el equilibrio entre lo digital y lo analógico. Aunque el campo de la visualización de datos está ligada a gráficos informáticos, me interesaba el contraste del barro, su irregularidad y producción totalmente manual”.

Y ahora bien: ¿En qué ha consistido la residencia de Enrique Radigales en LABoral? ¿Sobre qué trata Totem Evanescente de Datos?

“La residencia la he enfocado a un momento donde el margen de error era muy alto. Lo de fracaso estaba muy presente. Se lo planteé a los chicos de Plataforma 0 de LABoral. Solo había dos o tres semanas para desarrollar un proyecto, y en lugar de ser estrictos con el resultado, la idea fue movernos en un margen de error, de manera que no nos interesara tanto el éxito como el fracaso. Creo que la residencia es un momento donde la experimentación y el riesgo deben ser los detonantes del proceso”.

Tótem evanescente, Enrique Radigales

La obra que ha creado Radigales durante su residencia en LABoral es Tótem evanescente y trata fundamentalmente sobre la inmaterialidad tecnológica; es decir, sobre el hecho de que lo inmaterial en la tecnología realmente no existe, porque siempre hay un componente o recurso material detrás. “El principio de Totem evanescente es el de la materialidad tecnológica, sobre la idea de que detrás de la tecnología hay toneladas de recursos naturales. Creo que pocas veces nos planteamos cuánta energía es necesaria para enviar un mail, o cuantas toneladas de recursos naturales son necesarias para diseñar la última actualización de Android.” (…)

“Este Tótem que es físico, también tiene una formalización digital, que habita en Internet en formato vídeo. Por lo tanto son interdependientes, su formalización física no tendría sentido sin su homónimo digital”. El tótem es todo, con todos los materiales que conlleva detrás. “El mismo vídeo, por ejemplo,  no podría existir sin la materia. Este artefacto (tótem) tampoco podría existir sin el vídeo: es una relación de interdependencia”.

Totem Evanescente, vídeo del proyecto en Vimeo.