Artista en residencia: Mario M. Martínez
Recreación de la cigüa, amuleto de origen asturiano, en un proyecto instalativo.
Proyecto: Agüeyo
La cigüa es un amuleto de origen precristiano contra el mal de ojo con forma de puño cerrado, dejando entre los dedos índice y corazón. Pese a haber perdido su vinculación ancestral, esta figura sigue plenamente integrada en la cultura popular ya que aún es habitual como obsequio para los recién nacidos por parte de algún familiar cercano. De partirse significa que ha salvado a la persona que la lleva de un hechizo de gran magnitud y se dice que solo funciona si ha sido un regalo o fruto de un robo.
Otra tradición bien arraigada en la idiosincrasia asturiana es la resilencia que, para bien o para mal, nos acompaña colgada al cuello, muy cerca del pecho. Una aceptación de la condición propia forjada a golpe de encadenar una crisis tras otra y que ejerce una doble función: nos sostiene frente a la adversidad pero nos traslada en el avance.
Durante su residencia en LABoral, Mario M. Martínez investigará sobre estos conceptos (mal de ojo, resilencia..) para plasmarlos en una instalación. Utilizando diferentes materiales como el acero, la resina y otros metales creará en Agüeyo su propia cigüa acompañado por un texto animado.
Proyecto seleccionada en la I Convocatoria de Residencias Artísticas 2023
Actividad financiada y promovida por la Consejería de Cultura, Política Lingüística y Turismo